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Voy
a realizar una breve autobiografía para que así me podáis conocer algo mejor.
Mi
nombre es Mariam, Bakali Tahiri Orihula, tengo 23 años y nací en Los Palacios y
Villafranca (Sevilla), donde reside mi familia materna. Tengo dos hermanos
mayores, por lo que yo soy la pequeña de la casa. Mi madre, Manuela, es
española y mi padre Mohammad, es marroquí.Pues
bien, con 8 meses, mis padres decidieron que nos iríamos a Marruecos a vivir,
ya que le había salido una oferta de trabajo muy buena a mi padre. Por lo que
nos fuimos a vivir a Larache, donde no me sentaba bien el clima.
Me llevaba
todo el tiempo malita a causa de la humedad, ya que soy alérgica a ella, pero
en aquel entonces no se sabía, por ello mismo, mi madre decidió regresar a
España conmigo y con mis hermanos, ya que mi padre tenía que quedarse hasta
vencer el contrato de trabajo.Nuestro
regreso fue a Brenes, donde he pasado el resto de mi infancia y adolescencia y
donde residen mis padres a día de hoy, ya que yo actualmente vivo en Sevilla
capital con mi pareja.Con
5 años y medio mi padre decidió apuntarme al atletismo, ya que no le paraba de
insistir que quería ir con mis hermanos y entrenar con ellos. Era muy pequeñita
pero aún así me aceptaron. Para mí el atletismo formó a ser un pilar importante de mi vida, ya
que entrenaba tres días a la semana y cada día le dedicaba 4 horas
aproximadamente, más el fin de semana de competición. A medida que iba
creciendo y obteniendo resultados, mi entrenador observó cualidades de las
cuales se podía sacar bastantes beneficios, por lo que decidió dedicar me más
tiempo de entrenamiento y poder pulir mis habilidades. Debido a la dedicación tan
intensa, mi padre decidió que la mejor solución sería quitarme, ya que el
atletismo se convirtió en mi día a día y los estudios estaban pasando a un segundo rango.Para
mí fue el decir adiós al deporte un paso muy fuerte. Me llevaba días y días
llorando, entristecida, casi como una adicción era para mi. Mi padre decidió
hablar con mi entrenador cuando tuve 13 años y con 14 fue mi último campeonato.
Mi padre aterrado, ya que llevaba un año sin entrenar, por lo que podría tener
una gran lesión. Pero le pedí que sería mi última vez y que por favor, que me
cediera este deseo. Y así fue. Con este último campeonato la despedida final al
atletismo me fue más fácil y ya sí pude decir, adiós.Respecto
a mis estudios nunca he tenido problema, siempre he visto la parte buena y
positiva de ello, por lo que he progresado año tras año. Una vez finalizada la
selectividad decidí estudiar Derecho, para luchar en la sociedad, por
conseguir la integración de los individuos, provengan de donde provengan. Y
poder luchar para eliminar los estereotipos, para así poder ver a todas las
personas como lo que son, personas y no sentirnos superiores o inferiores a
ellas, debido a su etnia, religión o país.Pues
bien, mi primer año lo realicé en Huelva, para experimentar y ser más
autosuficiente, mi padre tomó esta decisión, de irme sola. En el segundo
cuatrimestre tomé la decisión, que tanto tiempo llevaba queriendo hacer, la cual
fue; ponerme el Hijab. Llevaba queriéndome lo poner desde los 15 años, ya que
mi padre jamás me lo impuso, siempre me inculcó valores, principios,pero jamás
me impuso nada, lo cual te hace escuchar, reflexionar y querer indagar y
aprender más. Ya que tenía dos vertientes, la católica, por la familia de mi
madre (ella no lo es, ya que se hizo musulmana) y el islam.
He de admitir que tuve que sacar mucho coraje para dar este
paso, debido a la sociedad en la que vivimos. Pues pensaba; yo no impongo nada a
nadie, ni decido como han de ir, ¿Por qué yo no voy a poder ponerme un pañuelo
e ir con ropa modesta ? por lo que una mañana decidí que quería ser feliz, y no ser dominada por este sistema en el que todos han de ir como él quiere, y si no es
así has de ser señalado con el dedo. Pues ¡NO! Así que quise imponerme ante él y
ser yo misma.
Todo esto no fue nada fácil, he de admitirlo, ya que estaba
en Huelva sola y anteriormente, había estado con el hijab. Por lo que fue muy
chocante. Recibí críticas directas e indirectas, rechazos de personas, con las
cuales anteriormente me había llevado muy bien, aunque he de decir, que todo esto
me sirvió para ver quién realmente estaba conmigo de corazón y quién no, por lo que las pude contar con
los dedos de las manos y me sobraban dedos.
También con la familia materna tuve una grandísima prueba,
ya que mi abuela jamás quiso que yo me relacionara con los árabes ni que casara
con un árabe, cuando menos ponerme un hijab. También con las/os hermanos de mi
madre me ha sido difícil, ya que al principio me rechazaban, e incluso
empezaron a especular sobre mí.
Socialmente también me fue bastante difícil, para qué ocultarlo,ya que no estaba acostumbrada a las críticas directas, y aunque tenga
coraje y eche valor a las cosas, también soy humana, por lo que había días que
llegaba llorando, preguntándome, ¿Por qué? ¿Por qué me ven como algo raro? para
ellos es una simple tela, en cambio yo los respeto vayan como vayan, y no voy
molestando a nadie, cuando lo importante es el fondo de la persona. No lograba entenderlo.
Todo esto, con muchísima paciencia, me ha servido para
aprender , crecer y madurar muchísimo. Poder apreciar lo que realmente merece
la pena, a mirar la vida desde otra perspectiva, y darle el valor y el sentido que realmente
tiene y no el que nos dibujan los medios e comunicación.
Pues bien, en Huelva me llevé dos años haciendo Derecho y no
pude continuar en Huelva debido a la humedad, ya que estaba casi siempre
malita, como me pasaba también en Larache(Marruecos), por lo que decidí pedir
el traslado a Sevilla, el cual me resultó imposible cumpliendo con los
requisitos, así que decidí meterme en Trabajo Social, ya que mi decisión a priori de estudiar Derecho se
basaba en principios Sociales, en luchar por ellos, y Trabajo Social es lo que
ofrece, una mejora y lucha hace ellos. Y así, después, con la titulación directamente
podré finalizar mis dos años que me quedan de Derecho.
Actualmente
me encuentro cursando primero de Trabajo Social en UPO, viviendo con mi pareja
y luchando por lo que quiero.
Finalmente puedo decir, que realizar la autobiografía me ha hecho revivir muchos momentos de mi vida, valorarlos uno por uno y darme cuenta de que todo sacrificio, después tiene su fruto.
Agradecida quedo de que el profesor Dº Manuel, de HHSS nos haya propuesto hacerla porque he de decir que me ha resultado muy gratificante,ya que no solo he explayado momentos de mi vida, si no también he ido reflexionando, lo cual me ha llevado a recapacitar mucho.
Agradecida quedo de que el profesor Dº Manuel, de HHSS nos haya propuesto hacerla porque he de decir que me ha resultado muy gratificante,ya que no solo he explayado momentos de mi vida, si no también he ido reflexionando, lo cual me ha llevado a recapacitar mucho.
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